Ezequiel Barco resignó dinero para destrabar la negociación entre clubes y solicitó que aquel monto sea destinado a la infraestructura de inferiores
Como sabemos, en este mercado de pases, el surgido de las divisiones inferiores de Independiente se convirtió en el segundo jugador cuya venta le dejó más plata al club. Barco emigrará a Estados Unidos para jugar en el Atlanta United de la ciudad homónima. La negociación entre el club y los del país del norte se tornó tensa por momentos y demasiado complicada, tal es así que varias partes debieron ceder algún dinero para que la venta se concrete y el Turri pase a ser nuevo jugador del equipo del Tata Martino.
El mismo futbolista no quedó afuera de aquel afloje para conciliar la negociación. Ezequiel dejó al club alrededor de 800.000 dólares, una cifra más que importante, para resolver lo más rápido su futuro y, además, ordenó que hacer con ese dinero: recomendó que se armen dos canchas en el predio de Villa Domínico, cada una de césped sintético para que los jóvenes de las inferiores no pierdan el día de trabajo cada vez que hay lluvia y para que sus condiciones de entrenamiento se optimicen. Fiel a sus raíces, el Turri brindó ese gesto acordándose de sus primeros compañeros y del sector institucional que lo vio crecer, la cantera.
Por Elías Bernal (@ElíasBernal_97)