martes, 13 de octubre de 2020

Cara y ceca

Con el regreso a la actividad oficial cada vez más cerca, el plantel de Independiente continúa disputando amistosos. Este sábado hubo dos encuentros frente a Deportivo Morón en el Libertadores de América, ambos con un mix de titulares y suplentes. Tanto desde el resultado -una derrota y un triunfo- como desde el rendimiento, los dirigidos por Lucas Pusineri mostraron versiones mejoradas en algunos aspectos y en otros siguen en deuda. El debut de algunos refuerzos y el retorno de Pablo Hernández, lo más destacado.
Menéndez encara a un rival en lo que fue derrota del primer partido

En el marco de la preparación para la competencia oficial, Independiente recibió este sábado por la mañana a Deportivo Morón en su estadio. Allí se disputaron dos encuentros abreviados, con balances dispares. En primer turno se vio la peor cara del Rojo: un equipo deslucido, con una defensa que otorgó muchas ventajas y un ataque improductivo. El 2 a 0 final en contra resultó inapelable y, probablemente, le haya generado más de un interrogante al entrenador. El segundo partido fue de lo mejor de los de Avellaneda desde el retorno a las prácticas. La inclusión de Pablo Hernández tras su lesión ligamentaria resultó clave para un conjunto que dominó de principio a fin. El gol llegó de la mano de Silvio Romero, quien aprovechó uno de los tantos horrores en la última línea del rival. Se trata en ambos casos de choques de pretemporada tras un parate de casi siete meses, por ende, cualquier análisis o conclusión sólo puede ser parcial y debe comprenderse en este contexto tan atípico.

El primer combinado del Orgullo Nacional nunca logró volumen de juego ni pudo generar peligro en ninguno de los dos tiempos de 35 minutos que se disputaron. Lucas Romero estuvo muy irregular, Jonathan Menéndez intrascendente y Nicolás Messiniti demasiado aislado. Tampoco estuvo firme el fondo, ya que la zaga conformada por Juan Di Lorenzo y Sergio Barreto no pudo detener a un rival que bien organizado supo controlar las acciones, imponer su ritmo y definir el cotejo con combinaciones certeras. En ese sentido el "Gallo", con mayoría de titulares, se llevó por delante a su adversario durante la mayor parte del juego. Al promediar el segundo tiempo los del oeste construyeron dos jugadas interesantes que terminaron por convertirse en gol -sin responsabilidad del portero Jure Marinovich que había reemplazado minutos antes a Renzo Bacchia-. El resultado fue justo, aunque tal vez algo exagerado. Desde el juego muy poco para rescatar, salvo el debut de Lucas Rodriguez en el lateral izquierdo. Con altibajos, como todo el equipo, el ex Tigre no logró destacarse en la faceta defensiva ni tampoco pasando al ataque a pesar de sus intentos reiterados. Nuevamente, Fabricio Bustos y Alan Velasco fueron los puntos más altos de un elenco muy pálido.

En segundo turno, el Rey de Copas ofreció una versión distinta frente a un Morón alternativo durante los 60 minutos de juego. Con el regreso de Hernández, quien manejó los hilos del conjunto de Pusineri, hubo mayor protagonismo, juego asociado y varias situaciones de riesgo frente al arco rival. A partir de la presión del debutante Federico Martinez -impreciso aunque movedizo en ataque- llegó el único tanto del cotejo sobre el final: Silvio Romero, que ya había desperdiciado alguna chance, tomó la pelota entre medio de los defensores erráticos del visitante y desde afuera del área definió al segundo palo. Gol y triunfo merecido. Lo más relevante, sin embargo, pasó por los pases filtrados y la presencia del tucumano en el mediocampo y los desbordes de Gonzalo Asís. El juvenil ganó en confianza, a tal punto que se animó a ensayar un disparo que se estrelló en el ángulo superior derecho del arquero. Por otra parte, llamó la atención la escasa gravitación de Andrés Roa que buscó sin éxito sumarse al circuito futbolístico rojo. También hay que mencionar la vuelta al primer equipo de Carlos Benavidez, sumando un puñado de minutos desde el banco. El rendimiento, en líneas generales, fue parejo y la victoria por la mínima podría haber sido más abultada.
El "Chino" Romero, autor del único gol Rojo durante los dos amistosos

En definitiva se trata de un par de nuevos amistosos que permiten, por un lado, que todos los integrantes del plantel profesional ganen minutos de juego y, por el otro, que el entrenador vaya analizando rendimientos y probando esquemas con el objetivo de formar un equipo competitivo para afrontar el campeonato local y la Copa Sudamericana. Las conclusiones de esta serie de encuentros -a los se sumaría un nuevo choque frente a Banfield el próximo sábado- no pueden ser de ningún modo determinantes. Son ensayos informales a partir de los cuales apenas si se vislumbra una formación titular. Más allá de los resultados y del nivel de juego exhibido, los torneos oficiales comienzan a fines de este mes. Cada vez falta menos. Allí hay que apuntar.

Primer equipo (derrota 2-0): Renzo Bacchia; Fabricio Bustos, Sergio Barreto, Juan Di Lorenzo, Lucas Rodríguez; Lucas Romero, Lucas González; Alan Velasco, Alan Soñora, Jonathan Menéndez y Nicolás Messiniti.

Segundo equipo (victoria 1-0): Milton Álvarez; Gonzalo Asís, Alexander Barboza, Alan Franco, Tomás Ortega; Tomás Pacchini, Pablo Hernández; Domingo Blanco, Andrés Roa, Federico Martínez y Silvio Romero.

Cristian Vilardo