El Rojo cayó ante Newells por 3 a 2
en Avelllaneda y sumó una nueva decepción en el 2019. Con este resultado, se
ubica en la décimo quinta posición y la crisis se acentúa cada vez mas. El
futuro es incierto para un plantel que no logró ninguno de los objetivos
propuestos: Afuera de la Copa Argentina y Sudamericana en Cuartos de Final y
casi sin chances de lograr la Superliga con ocho partidos por delante.
El infierno está encantador. Pero en
el mal sentido porque a Independiente no le salió una bien en un año que querrá
olvidar rápidamente. Luego de estar en ventaja dos veces, otra vez volvió a
perder por sus propios errores y lo pagó caro. La derrota ante Newells por 3 a
2 en el Libertadores de América, desnudó otra vez las falencias de un equipo
que dejó mucho que desear durante el año. Con 21 puntos, se ubica a nueve
unidades de Argentinos Juniors, con un partido menos. Utópico parece para este
plantel poder llegar a pelear la Superliga después del receso.
“El Independiente que no queremos
está a la vuelta de la esquina”, habían sido las palabras de Ariel Holan, antes
de su salida como entrenador del Rojo en mayo de este año. El director técnico que
supo ser campeón de la Copa Sudamericana 2017, dejó al equipo clasificado a los
Octavos de final del certamen continental tras una serie complicada ante Río Negro Águilas Doradas de Colombia. Luego de su ida del banco de Independiente
tras dos años y medio, el ex entrenador de Defensa y Justicia parecía anticipar
lo que se venía.
Es que Independiente después de Holan
volvió a parecerse al equipo sin identidad de temporadas anteriores. Si bien
con el Profesor ya había empezado a perder ese Compromiso, Actitud, Intensidad,
que fue el lema de su gestión, con la llegada de Sebastián Beccacece se
profundizó.
Se gastaron 15 millones de dólares en
refuerzos. Llegaron Sebastián Palacios, Cristian Chávez, Alexander Barboza, Andrés
Roa, Lucas Romero. Ninguno cumplió con las expectativas propuestas y el equipo
de Beccacece nunca se asemejo, ni un poco, a lo que el ex ayudante de Jorge
Sampaoli en la Selección Argentina había realizado en Defensa y Justicia.
Eliminaciones en Cuartos de final de
Copa Sudamericana y Argentina, a manos de Independiente del Valle y Lanús,
respectivamente, fueron el detonante para su salida. Sólo duro 16 partidos la excursión
de Beccacece por la parte Roja de Avellaneda, con 8 triunfos, 7 derrotas y 1
empate. El público de Independiente no soportó la falta de carácter del
entrenador para manejar ciertas situaciones y la falta de identidad del equipo
fue notoria en la mayoría de los partidos.
El arribo de emergencia para Fernando
Berón, coordinador de las divisiones inferiores, fue un “manotazo de ahogado”
de una dirigencia a la deriva. Los triunfos ante San Lorenzo y Godoy Cruz
invitaron a la ilusión, pero las caídas ante Banfield y Newells volvieron a
mostrar las falencias de un plantel que no da la talla con la historia de
Independiente.
Hubo olor a final de ciclo para muchos
en la caída ante los rosarinos. Martín Campaña, Alan Franco, Nicolás Figal, Pablo
Pérez, Martín Benítez y la lista sigue. El “que se vayan todos” volvió a
resonar en el Libertadores de América. Y el futuro asusta.
Independiente deberá refundarse.
Necesita encontrase de nuevo con su rica historia. Saber a lo que apunta. La
llegada de un manager o Secretaria Técnica que determine quién será el próximo entrenador
parece ser crucial.
La Comisión Directiva ya se reunió con
Hernán Crespo y Alejandro Kohan, también con Pablo Guede y en los próximos días
será el turno para Lucas Pusineri. Deben definir Hugo Moyano y compañía en lo
que puede ser la última jugada de una dirigencia que ya no tiene el aval de los
socios. La gente explotó contra los dirigentes y los ánimos están caldeados.
En el horizonte aparecen River, Boca,
Rosario Central y Racing como los principales compromisos para el Independiente
modelo 2020. El futuro es desalentador, veremos quién es el encargado de
ponerle el “pecho” a la dura situación. La crisis está latente, pero el barco todavía
no se hundió.
Por: Leonardo Papaleo (@papaleoleo1983)