El Rojo cayó 1 a 0 ante Aldosivi en Mar del Plata y dejó más dudas que certezas en su excursión a Mar del Plata. El gol de Martín Cauteruccio en el amanecer del encuentro fue un cimbronazo del cual el equipo de Julio César Falcioni no se pudo reponer. Cuarta derrota en el campeonato para los de Avellaneda que quedaron lejos de los primeros puestos.
Independiente no encuentra
el rumbo y ya es una circunstancia que amerita el diván. Es que el Rojo cada vez
que enfrenta a un rival inferior en cuanto a lo futbolístico, insólitamente el
rendimiento decae y no cumple con las expectativas. Hace rato que el Rojo no es
ese equipo arrollador de las primeras fechas y su nivel está en declive. Sin
dudas, la actuación en Mar del Plata hace replantear mucho de cara al futuro.
Cuando el Rojo debe ganar obligatoriamente increíblemente falla. Además, cayó
ante un rival que hacía ocho partidos que no ganaba y se encuentra en los
últimos lugares de la tabla de posiciones.
En el comienzo
del encuentro, el equipo de Falcioni había arrancado con tenencia de pelota,
pero con ese toque intrascendente. Intentaba tener salidas prolijas desde el
fondo, pero en una de esas transcurrían solo dos minutos, el “perro” Lucas
Romero fue asfixiado por la marca del conjunto dirigido por Martín Palermo y
con un pase filtrado (otra vez como ante Gimnasia encontró a Sergio Barreto
fuera de foco) lo que posibilitó que Martín Cauteruccio aparezca en una
inmejorable posición para picar la pelota por encima de Sebastián Sosa y marcar
el primero. Aldosivi sorprendía e Independiente lo padecía.
Los horrores en
defensa son una marca registrada del último tramo del campeonato para el equipo
de Avellaneda. Muy mal partido de Juan Manuel Insaurralde en su regreso tras la
suspensión, tampoco Fabricio Bustos ofrece garantías. El Rojo está en un
declive profundo en todas sus líneas y ya nadie se salva del incendio.
El trámite otra
vez se había hecho cuesta arriba para Independiente y el equipo no lograba
generar situaciones de peligro. Las dos más claras del Rojo fueron de pelota
parada: Una de Insaurralde y otra de Barreto. Muy poco.
En el
complemento, Falcioni mandó a la cancha a Andrés Roa y a Jonatán Herrera, pero
aportaron mayor intrascendencia al juego como conjunto. El rival se paró de
contra y el Rojo sólo tuvo una chance con Herrera que definió mal tras una
corazonada de Alan Velasco.
La impotencia de
Independiente chocó una y otra vez contra la defensa de Aldosivi que apostaba a
algún contragolpe para liquidar el partido. Para colmo de males, Barreto vio la
roja a cuatro minutos del final. Además, el ingresado Tomás Pozzo estrelló su disparo
de zurda contra el palo en el primer tiempo de descuento.
Con esta derrota,
Independiente sigue con la malaria. En los cinco partidos que visitó al Tiburón
en Mar del Plata no pudo convertirle. Sólo sumó dos puntos de los últimos doce
y sigue desperdiciando chances de ubicarse en puestos de Copa Libertadores. Sin
dudas, el Rojo atraviesa su peor momento, acumula malas actuaciones y el equipo
se cae a pedazos. Se vienen dos partidos de local (ante Sarmiento y Unión),
mientras que Aldosivi logró una victoria más que importante pensando en la
tabla de los promedios para el año que viene.
Por: Leonardo Papaleo