domingo, 21 de noviembre de 2021

Otro papelón y van...

Independiente volvió a decepcionar con otra actuación para el olvido. Cayó en Santiago del Estero por 1 a 0 con Central Córdoba y mostró otra pálida imagen en un torneo que pide a gritos que se termine. De esta manera, quedó lejos en su ambición de ingresar a la próxima Copa Libertadores.


Aburre Independiente. Da sueño ver a este equipo. Si alguno se durmió en la calurosa noche del sábado, es entendible. Es que Independiente sigue dando vergüenza ante rivales inferiores en este campeonato. Cosechó otra derrota, esta vez ante Central Córdoba en Santiago del Estero por la mínima diferencia y ya no depende de sí mismo para ingresar a la próxima Copa Libertadores. Igualmente con el nivel mostrado, lejos está de ingresar a algún torneo internacional.

En un primer tiempo parejo, los dirigidos por Sergio Rondina arrancaron mejor, pero el Rojo lo fue emparejando con el correr de los minutos. Sobre los 22 minutos, llegó la gran polémica de la noche. Luego de un remate de media distancia de Lucas González, el arquero César Rigamonti dio rebote y Silvio Romero definió para abrir el marcador. Sin embargo, Fernando Echenique anuló la acción por un off side inexistente.

En el complemento, el elenco local salió mejor parado e Independiente empezó a sentir el trajín del partido. Como en los últimos encuentros, los dirigidos por Julio César Falcioni se fueron apagando y no estuvieron a tono con el ritmo del encuentro. 

Sobre el cuarto de hora de juego, llegaría el baldazo de agua fría para todo Independiente. Fue cuando Silvio Martínez encaró desde la derecha hacia el centro y tocó atrás para Cristian Vega, quien con un perfecto derechazo la colgó del ángulo derecho del arco defendido por Sebastián Sosa que nada pudo hacer.

A partir de ese instante, Independiente sintió el cimbronazo y fue por el empate. Con más empuje que ideas, aunque ese gol le hizo perder el eje. Tuvo apenas un remate de Domingo Blanco que tapó Rigamonti. Pero nada más. Le faltaron asociaciones, se apagó Velasco (en realidad nunca se enchufó), Roa brilló por su ausencia y los volantes no se sumaron a empujar. Por su parte, Central Córdoba consumió los minutos con astucia.

Fue otra derrota ante un rival inferior. Ya habían pasado los papelones ante Atlético Tucumán, Aldosivi, Newells, Lanús y Godoy Cruz. De papelón en papelón.

En la próxima fecha se viene Boca. El Rojo sabe que ya no puede volver a perder. Una derrota en el clásico podría ser determinante para la salida del entrenador. El equipo no le responde y parece que sus horas están contadas en el club. El miércoles puede llegar a ser el fin de un ciclo agotado. La paciencia de los hinchas también parece estar agotada. Sin dudas, se vivirá un clima enrarecido en Avellaneda. Sabe Independiente que no puede dar otro paso en falso, aunque el campeonato siga pidiendo a gritos que se termine.

Por: Leonardo Papaleo